La angustia de ser libres
En esta entrevista tuvimos el placer de hablar con Rafael Garoz, médico, uno de los mejores psicoterapeutas de madrid desde la rama existencial y escritor. Nos hizo partícipes de un viaje para conocer qué es la libertad, en general y desde el existencialismo, y cómo nos afecta en nuestro día a día, junto con consejos sobre cómo abordar y trabajar la angustia que acompaña a la libertad.
¿Qué significa ser libre?
Os traemos el resumen de la entrevista que se le hizo a Rafael Garoz,uno de los mejores psicoterapeutas de madrid y escritor. En ella pudimos hablar sobre la libertad y cómo nos afecta.
La entrevista empieza fuerte desde la primera pregunta, en la que se quiso explorar qué es la libertad y qué significa ser libre. Rafael nos contestó haciéndonos notar que se trata de una palabra especial, pues siempre está entonada con una connotación positiva, y dejándonos claro que, para él, “la libertad es todo”, siendo ese todo algo casi imposible de captar.
Apoyándose en la Real Academia de la Lengua (RAE) la libertad se define como “facultad natural que tiene el hombre de obrar de una manera o de otra y de no obrar por lo que es responsable de sus actos”. El entrevistado nos comentó como “la facultad de obrar y de no obrar” le llamaba la atención, sobre todo ese Y que implicaba adición, cuando él considera que la libertad, lo que justamente hace, es colocarte en la disyuntiva de elegir entre una opción u otra.
Por otro lado, mirando el término desde la tradición filosófica, se define como la “facultad de autodecisión y de autodominio que ejerce la voluntad”.
Al final, nos dice Rafael, las partes comunes de toda definición reside en la autonomía y la capacidad de decisión del individuo. Y esto se mantiene hasta la entrada de la mirada existencial.
Antes de entrar en la libertad entendida desde el existencialismo, quisimos saber si había más campos que estudiaran la libertad, aparte de los ya mencionados. Rafael le dio la vuelta a la pregunta, dejando claro que todos los campos del conocimiento humano la han estudiado.
Historia de la filosofía y libertad
Y entre esos campos está el existencialismo, y nosotros quisimos saber cómo se veía la libertad desde esa mirada existencialista. El Dr. Garoz, uno de los mejores psicoterapeutas en Madrid, nos explicó cómo a través de la historia de la filosofía, la libertad no era cuestionada. No fue hasta Kierkegaard que la cuestión de la libertad se puso encima de la mesa de estudio, a través de su mirada existencialista.
Kierkegaard, nos explicó el entrevistado, se dio cuenta de algo muy importante. Él decía que: “no puede haber libertad humana si no existe la angustia asociada a tener que decidir y a responsabilizarse de esa decisión”. Según cómo tomamos decisiones en aspectos que nos importan, estas pueden generarnos angustia ante la posibilidad de equivocarnos.
Si bien Kierkegaard es el máximo exponente del existencialismo, no es el único que aportó a la definición de la libertad en este movimiento. Otros autores como Nietzsche, Sartre (“estamos condenados a ser libres”), Heidegger (“la libertad es la antesala para llegar a la verdad”) y Jasper (“la elección, yo no elijo una cosa u otra, un objeto u otro, me elijo a mi mismo en cada decisión”) aportan su propia visión de la libertad desde esa corriente, todos coincidiendo en un respeto reverencial por la misma.
Síntomas cuando la libertad nos angustia
Una vez definida la libertad y sus implicaciones filosóficas desde el existencialismo, se exploró su relación con diferentes síntomas y patologías del día a día. Rafael nos comentó que en su día a día en consulta siempre se ha encontrado un “pálpito de libertad” presente en la persona. Es decir, siempre hay una parte de los síntomas y la patología que se relaciona con el término de libertad.
Con un ejemplo de psicología clínica, nos explicó como una crisis de angustia puede venir de una angustia entendida como “vértigo de la libertad”. Este se vuelve un problema serio para llamar la atención de la persona que sufre. Esto genera un estado en la persona que le lleva a buscar la ayuda que le permita solucionar su situación, haciéndose responsable de sí mismo.
Partiendo de esa situación terapéutica, el entrevistado nos explica como, en su trabajo, siendo uno de los mejores psicoterapeutas de madrid, el da la enhorabuena a ese tipo de pacientes, por haber sido capaces de escuchar, y ver, una señal que les indica que algo está pasando y hacer algo con ella. Pero no solo se trata de dar la palmada en la espalda, también hay que abordar esa angustia y conseguir que sea manejable, y no entorpezca, el diálogo terapéutico en el que se reconstruyen las señales que han provocado que la persona venga a la terapia. Cuando la persona es capaz de hacerse cargo de sus asuntos angustiantes propios el cuerpo retrocede en su protesta.
Siguiendo ese hilo de pensamiento, quisimos saber cuando el cuerpo no retrocedía y empezaba una patología. Rafael, nos contó cómo él consideraba que esa angustia, al avisar a la persona del problema, podía elicitar diferentes respuestas en la persona que lo sufría: bien podía negarse (a través de conductas evitativas y de huida) si bien no soluciona el problema; bien se busca tratar con profesionales que buscan quitar la angustia de cualquier manera (por ejemplo, con medicación que funciona igual que una respuesta de huida para no encarar lo principal). En definitiva, esa angustia puede llegar a patologizar porque no se aborda o porque no se entiende correctamente y busca quitarse completamente. Todo eso sin llegar a aceptar que la angustia es parte integral del ser humano.
¿Cómo solucionar el conflicto de tomar decisiones?
Con todo eso en la cabeza, queríamos saber más que se proponía desde un marco de psicoterapia existencial para poder solucionar ese conflicto con la angustia. El entrevistado nos comentó que lo primero siempre es escuchar “cómo el paciente entiende/construye el mundo” para poder darnos cuenta de que “ese modo de verlas” le hace sufrir y, por tanto, el trabajo puede entenderse desde una reconstrucción de esa visión del mundo que el paciente trae.
Una vez aclarado su funcionamiento en la terapia, quisimos abordar qué posibilidades había para poder afrontar esa angustia en el día a día. Siendo uno de los mejores psicoterapeutas de Madrid, el Dr. Garoz, partiendo de la clara premisa de que “vivir es aprender a coexistir con la angustia”, siempre teniendo en cuenta el mundo de los adultos, nos comentó que se pueden sugerir cosas diferentes: una es escribir sobre uno mismo y la emoción que se está sintiendo, y permitir que ese texto se extienda hasta llegar al núcleo de la situación. Pero escribir no es lo único, pues también podemos añadir hablar, escuchar y compartir. Es decir, participar cultivando el pensamiento crítico y, nos dice Rafael, “hacerse místico, bailar y escuchar mucha música” y, además, abrir diálogos con personas de confianza.
En la recta final de la entrevista se abordó el tema de la libertad y el confinamiento. Rafael nos responde haciéndonos ver que la libertad es algo que somos, no algo que tenemos, por lo que no pueden quitársela. Y nos deja un rayo de esperanza con que habrá personas que saldrán transformadas a mejor de la situación de confinamiento.
Si algo de esta entrevista ha resonado contigo, rellena el formulario si quieres trabajarlo en terapia.